¿Por qué animales limpios e inmundos?
Pregunta: La Biblia dice en el relato sobre la creación que Dios creó los animales y vio “que era bueno” (Gén. 1:25). ¿Cómo puedo comprender la instrucción de Dios a Noé en la cual habla de animales limpios y no limpios (Génesis 7:2)? ¿Estaba dada como una sombra de Levítico 11 donde el Señor interpreta los mandamientos para Su pueblo? Todo lo que Dios creó es bueno, ¿no es verdad? Que el hombre, por su apostasía de Dios, contaminó lo bueno, no corresponda a esta cuestión.
Respuesta: Antes de la caída no había nada profano o impuro porque: “...vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera” (Génesis 1:31). Aparte de esto, Dios – antes de la caída del hombre en pecado – no dijo que el hombre comiera carne, sino que dijo en Génesis 1:29: “He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre toda la tierra, y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer”. Solo después del diluvio Dios el Señor mandó que el hombre comiera también carne (Génesis 9:3).
Aquel “bueno en gran manera” de Dios incluía tanto a los hombres como también a los animales, sí, a todo el universo. Pero por la caída en pecado también la criatura muda fue arrastrada juntamente con ellos hacia la perdición. Y así como el hombre más tarde se dividió en las dos categorías de quienes buscaban al Señor y otros quienes le volvían la espalda a Él, algo semejante pasó también entre los animales: hay animales limpios e inmundos (Génesis 7:2). Esto se manifestó claramente cuando Noé los recibió en el arca. Cuando fue dada la ley, esta separación fue realizada con aún más agudeza. Por eso la Epístola a los Romanos dice en vista de la venidera renovación de la creación que tendrá lugar cuando vuelva Jesús: “Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios” (Romanos 8:19). Esto se refiere a la manifestación de los hijos de Dios con Jesucristo en gloria (Col. 3:4).
W.M.