El cristiano en sus amistades y en el matrimonio
Pregunta: La amistad fue suspendida. ¿Cómo puedo permanecer firme? Dos años atrás conoci a un joven católico. Nos hicimos buenos compañeros y de esto nació un amor mutuo.Pero yo sabía que Dios nunca podría añadir Su bendicón a este amor. Por eso me separé de mi novio y fui al exterior por un año. Le dije que me decidí por Jesús y que por eso no puede haber un futuro juntos: a pesar de esto, él me visitó varias veces mientras estaba en el exterior. Ahora estoy de vuelta en mi patria. Mi amor a esta persona permanece. Le pedí que no me visitara más porque quiero pertenecer totalmente a mi Salvador. Pero desde esa decisión, paso por graves aflicciones y a veces necesito un tremendo poder para vencer y hacer mi deber. Le ruego que ore por mí. Me rendí nuevamente al Señor, entregándole también a mi amigo quien está “abierto y busca a Dios”. Yo sé que Jesús para mí es mucho más precioso que un profundo amor a este hombre.
Respuesta: Que Dios le dé mucha gracia para permanecer firme en el camino nuevo que comenzó a andar y para nunca empezar un matrimonio que sería un enlace contrario a las normas de Dios. Mientras aquel joven siga siendo católico y no haya nacido de nuevo, ustedes no pertenecen uno a otro. Si usted cediera, le esperaría un matrimonio infeliz. Usted preguntará: ¿cómo puedo estar firme? Le doy el siguiente consejo:
1. Si usted se da cuenta de que su amigo no toma ninguna clara decisión a favor de Jesús, no oré más por él porque mediante la intercesión se mantiene una relación en el alma que se le hará imposible resistir con el tiempo.
2. Sea muy consecuente en el rechazo de cualquier forma de contacto.
3. Busque mucho la presencia del Señor mediante el estudio bíblico y la oración, y entonces conocerá también la voluntad del Señor para su vida personal y acerca de un posible esposo. Porque también su camino y sus obras ya han sido preparados por el Señor desde hace mucho tiempo. Lea esto, por favor, en Efesios 2:10.
Wim Malgo