¿Gaza entre la escasez de alimentos y la hambruna, o tal vez nada de eso?

No podemos dejar de señalarlo una y otra vez: a pesar de que Israel fue atacado y por lo tanto se está defendiendo, está siendo acusado y castigado por todo el mundo. Y la situación es más absurda todavía: Israel se ha propuesto defenderse de un enemigo que no solo atenta contra la vida de los israelíes, sino que quiere acabar con el Estado judío. Sin embargo, es a Israel a quien el mundo pide que alimente a este enemigo y a sus súbditos. Incluso los Estados que han catalogado a Hamás como organización terrorista insisten en las entregas de ayuda humanitaria de parte de Israel, sabiendo, como incluso ellos tuvieron que admitir, que grandes cantidades de estas entregas acaban en los depósitos de Hamás. Aunque estos Estados tampoco tienen una solución para este desequilibrio, ello no les impide seguir responsabilizando a Israel por todo esto. Los estudios israelíes que tienen en cuenta la cantidad de alimentos que Israel suministra a la Franja de Gaza y la que pone la comunidad internacional, llegaron hace meses a la conclusión de que, aunque la situación alimentaria no puede calificarse de buena y equilibrada, no existe una hambruna masiva como afirman reiteradamente muchos organismos internacionales. Por supuesto, hay documentos que muestran la entrega pública de alimentos y la necesidad que existe, así como las escenas con personas que intentan obtener suministros a la fuerza. Pero con la misma frecuencia, se pueden ver imágenes de puestos de mercado repletos de mercadería fresca y variada. En el verano de 2024, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación emitió una nueva evaluación basada en una escala que ella misma desarrolló en 2004 en la lucha contra la hambruna en Somalia y que se conoce como “Clasificación Integrada de las Fases de la Seguridad Alimentaria” (CIF). Básicamente, afirma que no hay hambruna en la Franja de Gaza en el momento de la evaluación, en julio de 2024. Sin embargo, este organismo supuestamente neutral predijo en marzo una hambruna masiva en la Franja de Gaza a partir del 15 de junio como muy tarde. Parece ocurrir lo mismo con el número de muertos. Primero, los organismos internacionales adoptan indiscriminadamente las cifras que les brinda la organización terrorista y las pregonan por todo el mundo. Cuando por fin se revisan y corrigen los números, las mentiras ya están arraigadas en la mente de la gente, e Israel sigue siendo el eterno villano.