Fuerza espiritual para cada día
“Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto; no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey. Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria.” 1 Pedro 5:2-4
La corona de gloria está destinada, primeramente, a los pastores de la iglesia, los predicadores. Estos tienen una gran responsabilidad. Ahora, los mismos también son el objetivo favorito del diablo. No critiques a tu predicador, más bien ora por él, para que predique la Palabra en el poder del Espíritu, y para que sepa hacer todo correctamente y, un día, también reciba la inmarcesible corona de gloria.
Según mi opinión, esta corona de gloria está reservada también para los padres y madres en Cristo, los cuales son ejemplo del rebaño. ¿Eres tú un ejemplo? ¿Se puede ver a Jesús en ti? ¿Eres una columna en tu iglesia? Es sumamente importante que Jesús pueda crecer en nuestras vidas para que seamos ejemplo. No deberíamos continuar siendo siempre unos bebés, sino que deberíamos crecer hasta la perfecta estatura de Cristo. ¡También para ti está preparada la inmarcesible corona de gloria!