Fuerza espiritual para cada día
“...el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar.” 1 Pedro 5:8
En este tiempo final, en el cual las actividades satánicas, según Efesios 6:12, aumentan de manera colosal, nosotros, como hijos de Dios, sólo podremos salir ilesos si permanecemos constantes en el velar y el orar. Nada es tan traicionero, como cuando los miembros del cuerpo de Jesús comienzan a dormitar espiritualmente. Entonces el enemigo ataca: entonces, ya te encuentras dentro de la trampa mortal. El Señor Jesús nos exhorta: “Y lo que a vosotros digo, a todos lo digo: Velad.” Y dirigiéndose a Pedro, en la noche en la cual fue traicionado, clama: “Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo.” Si el Señor mismo dice esto, ¿por qué entonces no lo tomas en serio? ¡Despierta tú que duermes! ¡Ponte toda la armadura! ¡Practica la victoria de Jesús en tu vida diaria!
Si somos atacados de esta manera, ¿no tenemos que temer que un día seamos derrotados? ¡De ninguna manera! ¡El que está con nosotros es mucho mayor, e infinitamente más fuerte, que aquellos que están contra nosotros! Por lo tanto: ¡De la mano de Jesús viajamos firmemente seguros hacia una patria mejor, la tierra prometida! Nadie podrá arrebatarnos de Su mano.