Fuerza espiritual para cada día
“... he aquí todas son hechas nuevas.” 2 Corintios 5:17
¿No vale la pena tomar este versículo en cuenta para el nuevo año que comenzará en pocos días? El Señor no sólo hace todo nuevo, sino que El continuamente hace todo nuevo, y lo hace de manera cada vez más clara y profunda. Dios ejecuta ese milagro de la renovación interior en el crisol de nuestras aflicciones, tentaciones y de nuestra miseria, como dijo en Isaías 48:10: “He aquí te he purificado, y no como a plata; te he escogido en horno de aflicción.” Cuando empezamos a ver las cosas oscuras y negativas, entonces recibimos una visión gloriosa. Naturalmente, nos sentimos cercados de poderes enemigos, pero los mismos fueron derrotados por Jesucristo en la cruz del Calvario. Pensemos en nuestro bienaventurado Señor y Salvador: Con qué soberanía y calma interior reaccionó ante los poderes enemigos que le rodearon pero, que pese a eso, no le pudieron hacer ningún mal. Aprendemos del Señor Jesús en cuanto a cómo permanecer sin ser tocados por el poder del enemigo. ¿Cuál era Su secreto? El estaba en el Padre, y el Padre estaba en El. De esa forma permaneció sin ser tocado. Esa capacidad de no ser tocado que tiene un hijo de Dios que permanece en su Señor, es una maravillosa realidad: “El maligno no le toca.”