Por qué los servicios de seguridad de Israel deben permanecer siempre alertas

Antje Naujoks

Israel sabe que los enemigos del país siguen muy de cerca la agitación interna que sacude a la sociedad israelí en estos momentos. Cuando destacados miembros del ejército y de los servicios de seguridad comentaron que esta situación estaba afectando a sus filas, se pudo oír a los enemigos vitorear aquí y allá. En algunos medios árabes se decía que “Israel se está desintegrando” y que uno podía “empezar a frotarse las manos”, porque el país no llegaría a cumplir 80 años. De este modo, algunos aludían también a las declaraciones del presidente de Israel, Isaac Herzog, quien recordaba en sus discursos que el reino judío ya se había derrumbado dos veces antes de llegar a sus 80 años de existencia. En efecto, las cosas no están realmente tranquilas en Israel en estos momentos, pero al mismo tiempo el país está demostrando lo funcionales que son sus medidas de protección. Los ataques contra objetivos militares iraníes en suelo sirio no cesan. El servicio de inteligencia exterior, el Mossad, pudo impedir un atentado en Grecia, perpetrado por dos ciudadanos paquistaníes, a los que se acusa de haber sido enviados por Irán. Los objetivos eran una sinagoga y un restaurante cercano, frecuentado por turistas israelíes. Se sospecha además que los hombres también querían secuestrar a ciudadanos de Israel. En 2021, el Mossad ya había sido capaz de impedir a tiempo un acto hostil de este tipo en Chipre, y en septiembre de 2022, junto con las autoridades turcas, había desarticulado una célula terrorista dirigida por Irán en Estambul.

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