
¡Esto también es posible!
La pandemia puso temporalmente fin a muchas iniciativas, como el programa “Marcha de los vivos”, que Israel lleva a cabo en Polonia desde 1988 y que conmemora a las víctimas del genocidio nazi en una marcha silenciosa desde Auschwitz a Birkenau. Este año volvieron a participar innumerables jóvenes israelíes. Tenían a su lado a sobrevivientes del Holcausto y a representantes oficiales del Estado de Israel. Todo era como siempre; y sin embargo, fue diferente al mismo tiempo, pues este año participaron también jóvenes árabes-musulmanes de los países con los que Israel concluyó los Acuerdos de Abraham en otoño de 2020, los Emiratos Árabes Unidos y otros países desde Siria hasta el Líbano, pasando por Arabia Saudita, Jordania, Egipto, Marruecos y también Turquía. Además estuvo presente una amplia delegación de miembros de la minoría árabe de Israel. Muchas docenas de jóvenes musulmanes, cristianos y drusos del Estado de Israel marcharon junto a sus compañeros judíos en la ruta entre los dos campos de exterminio nazis. Juntos participaron en actos educativos, entre ellos la familia musulmana Abu Ria, de Sajnín, en el norte de Israel. Su abuelo ya tenía amistades judías y les ayudó a emigrar a Israel ya antes de la fundación del Estado. Los varones de la familia sirvieron y sirven en el ejército israelí, porque para ellos es primordial que algo como la Shoá nunca vuelva a ocurrir. Sostienen que los judíos tienen derecho a un Estado soberano y que Israel es el único Estado del mundo para los judíos que será para siempre un refugio seguro para ellos.