Continúan los escándalos en la ONU

Antje Naujoks

Durante años, Israel ha señalado repetidamente que la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (abreviado UNRWA en inglés), no se dedica exclusivamente a asuntos sociales y educación. En el transcurso de los combates en la Franja de Gaza, Israel descubrió en repetidas ocasiones armas de guerra ocultas debajo o en las instalaciones de la UNRWA. No hay duda de que empleados de la UNRWA no solo vitorearon y glorificaron las atrocidades de Hamás en las redes sociales, sino que varios de ellos participaron en la matanza. Israel anunció que alrededor del diez por ciento, es decir, 1,200 empleados palestinos locales de las Naciones Unidas, son miembros de organizaciones terroristas palestinas. Estados Unidos lo confirmó basándose en sus propias investigaciones de inteligencia. Alemania fue uno de los primeros países en anunciar que dejaría de financiar a la UNRWA. Los países que suspendieron temporalmente los pagos son: Australia, Alemania, Estonia, UE, Finlandia, Francia, Reino Unido, Islandia, Italia, Japón, Canadá, Letonia, Lituania, Países Bajos, Austria, Rumanía, Suecia, Suiza y Estados Unidos. El comentario de la ONU fue: “Estos países serán responsables del colapso de la ayuda humanitaria que merece el pueblo palestino”.

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